Catado De Tequila

Un catador se esmera en identificar todas las cualidades de las muestras “ciegas”, llamadas así porque no vemos las marcas sino hasta el final de los resultados de todos los compañeros. Las cualidades se analizan en las evaluaciones siguientes:

Visual: Aquí, se admira la intensidad del color, si está cristalino, limpio, con correcta formación de piernas o lágrimas. Si la untosidad, es de calidad, es decir, si el producto baja despacio o en calidad “de aceite” por la copa, tiene mejor cuerpo.

Olfativa: En esta etapa nos concentramos en asimilar cómo se penetran mediante el olfato los aromas del tequila. Cuál es el impacto del alcohol vía nasal y retronasal; si huele a maderas con qué notas aromáticas,  su dulzura en el olfato, si percibimos frutas o especias y, finalmente, si tiene equilibrio en el alcohol y el aroma propio del agave.

Sesión De Catado

Gustativa: Se perciben los impactos alcohólicos con la boca, si es astringente o suave, si tiene fuerza o debilidad de sabor, si es limpio en sabores al correspondiente agave, si es frutal o especiado, herbal; si tiene equilibrio en la boca.

Táctil: Son admiradas las sensaciones quemantes del alcohol (en forma amable y soportable) para finalmente observar la longitud, es decir, si el aroma permanece una vez depositada la muestra.

Es importante mencionar que para poder llevar a cabo una sesión de catado, se sigue un “Protocolo para Catado Profesional”.

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